Niños …
Hoy me levanto y como todos los días me asomó al balcón, veo a unos niños paseando con un adulto, unos cogidos de la mano, otros subidos al patinete y jugando con la pelota.
Entonces caigo que hoy, se les ha permitido salir por primera vez bajo la fórmula 1+1+1. Es decir una hora, un kilómetro y acompañados de un adulto.
Entonces me llegan recuerdos de mi infancia, finalizada la guerra civil, sali a respirar un aire todavía contaminado por los efectos devastadores del odio y enfrentamiento, entre las gentes.
Mis juguetes no eran otros que una pelota de trapo, la hacía correr entre trozos de metralla y escombros… Sin embargo era feliz.
Hoy los niños a quienes considero pequeños héroes, después de 40 días de confinamiento que poco me gusta esa palabra, pueden salir una hora.
Y salen aún en plena guerra biológica y ante un enemigo al que aún no hemos vencido.
Dicen que los expertos científicos aconsejan sean los primeros en salir. Dicen que la mayoría son asintomaticos. Yo sin embargo, los veo como una avanzadilla para comprobar las condiciones de fortaleza que tiene nuestro enemigo.
Quisiera decirles, que hoy su salida en la lucha en que participan acompañados de algún familiar, es para abrir una brecha entre las filas de ese enemigo común, el Corona virus; y que por tanto, cuando se gane esta batalla, recordar que fueron ellos los que dieron el primer paso al frente, que consciente o inconscientemente, han sido protagonistas en la victoria y felicidad.
Como hace muchos años, sus abuelos que habían luchado por la libertad, consiguieron la Victoria de la concordia y generosidad, a través de unos pactos que ojalá se consigan en la actualidad, aunque solo sea para que los niños que hoy salen respiren libertad y felicidad.