EN PRIMERA LÍNEA DE FUEGO
El pasado mes de marzo, se inició una guerra bacteriológica.
El día 14 de Octubre, el Gobierno mediante el ‘Estado de Alarma’ declaró la guerra a ese enemigo invisible pero terrorífico.
Ese enemigo, llamado Covid-19, atacó sin piedad a toda la humanidad; cebandose con las personas más mayores. Especialmente en las que tienen 80 años o más. Se les identificó como de alto riesgo.
Las armas de las que se dotó para combatirla, fueron mascarillas, geles, distancia social o bien el llamado “confinamiento” es decir quedarse en casas convertidas en refugios.
Los mayores están, estamos en primera línea de fuego.
A la mayoría, por no decir todos, prefieren caer y ser el escudo de los más jóvenes, ya que han vivido mil batallas. No obstante, parte de la juventud parece no darse cuenta de su sacrificio.
Yo también fui joven y comprendo que a esa edad uno se considera inmortal.. Pero no es así! Aún estamos en plena guerra. Quiero ganarla pronto, ya que cada día que pasa me queda menos tiempo.
Sólo lo conseguiremos, si jóvenes, adultos y mayores… juntos unimos todas nuestras fuerzas y el lema es NO TENER MIEDO A COMBATIR y hacerlo con los únicos instrumentos que tenemos y todos conocemos.